Antes de empezar debemos tener en cuenta que no solo se trata de elegir los colores más populares para los muebles de melamina que vamos a diseñar, si no que también es necesario combinarlos o implementarlos con los muebles u objetos que rodean este ambiente. Para ello también debemos tomar en cuenta las paredes y/o materiales con la que están echas nuestro espacio.
Uno de más recomendado el color blanco, ya que este color otorga a nuestra cocina un tono de mayor limpieza y luminosidad. Tanto los muebles de melamina como las paredes u otros accesorios en el entorno con este color, nos dan un aspecto de amplitud y sirve también para lugares con poca iluminación.
Al elegir como color principal el blanco, podemos combinarlos con colores que ayuden a subir su nivel atractivo. Estos colores pueden ser: rojos, anaranjados, verdes. Los que van a permitir un mayor contraste. Si te preguntas ¿Y dónde colocarlo?. La mejor respuesta sería ubicarlos sea en tableros o de manera interior de forma de vinilo en las puertas de vidrio.
Ahora si eres de las personas que prefieren los colores oscuros, es muy recomendable de que tengas una cocina con gran amplitud y una muy buena iluminación. De no ser así nuestro ambiente podría verse opacado o con poco atractivo. De elegir los colores negros, azules y/o grises, necesitan ser combinados para bajar intensidad con tonos claros, acidos o llamativos. Por ejemplo: amarillos, verdes, violetas, naranjas y rojizos.
Es una buena opción implementar accesorios metalizados o de acero, que permitan darle mayor intensidad de luz a nuestro espacio. Así mismo objetos de cristales que ayuden a mantener un equilibrio.
Ahora que ya tenemos claro los colores debemos de tener en cuenta y mucho cuidado ya que este es el ambiente con mayor frecuencia en el que se habita. De tener colores intensos puede provocar un estrés o fatiga.
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